Cuestionar las canciones, cuestionar (y modificar) nuestras narrativas

Me recuerdo de niña cantando esa canción, (¡de niña!) llamada "Héroe"; imaginando historias con quien me gustaba entonces. Y en la secundaria sonaba aún, quizá, en la cabeza. Ahora, de adulta, la cuestiono y modifico, porque vaya que es cuestionable.

En general, ¿a poco no?, es difícil escuchar la radio, sin querer apagarla, por la cantidad de canciones de desamor y amor romántico; por letras que aceptan y promueven la dependencia, el machismo, el desamor propio... Dijera la cantautora española, La Otra, que "nadie nos dijo que fuese a ser fácil sacarse de dentro los cuentos de un príncipe azul" y otras perlas, deconstruirnos y apostar por el amor, y sin embargo, aquí estamos, encaminada.

Es bajo la inspiración de ella, de La Otra, que decidí modificar para mí aquella canción, con fines de catarsis, y para quien le sirva y quiera leer. Cada quien sus cantos y procesos, mas este muestra un poco del mío.

P.D. El primero que me viene a la mente para decir que sí hay canciones de amor, letras inteligentes y llenas de sentido, es Jorge Drexler. Gracias, maestro.

Antiheroína

Quiero ser antiheroina...

Ya una vez
pude llegar
a calentar
de cariño tu piel,
a llenarnos de amor las bocas,
y sentirnos esperanzadas después.

Y si entonces
nos aceptáramos tal cual
y festejáramos
ser fieles a nosotras...
Ay, sin dudar,
atención y tiempo dar,
como ya los doy aquí.

No quiero ser heroína de nadie,
yo no puedo ser tu Dios,
que salvarte a ti mil veces,
es nuestra perdición.

Si supieras
el amor que me tengo,
que alimenta
y me da paz en lo interno,
Es trascendente y más,
mira que al final,
lo que importa es que nos quiero.

Si pudiera ser tu heroína,
si pudiera ser tu Dios,
y salvarte a ti mil veces,
terminaríamos con el amor.

Déjame amarte,
quiero vernos al parejo,
construir juntas,
mira que al final,
lo que importa es que nos amo.

No quisiera ser tu heroína,
yo no puedo ser tu Dios, 
que dejar de salvarte a ti mil veces,
es nuestra propia salvación.

Quiero ser tu compañera,
si pudiera hacerte saber mi opinión,
porque amarme, es amarte,
ya he aprendido la lección;
esta es mi propia salvación.

No quiero ser heroína de nadie...